13 oct 2007

Parte XXXIII


Me empujo hacia la pared y me arrincono ahí, su pierna tocaba mi miembro y no tarde en ruborizarme, ya que sentía un cosquilleo dentro de mí.
-Te ves tan lindo ¿sabes? Estas ruborizado ¿te sientes avergonzado de que mi pierna este rozando tu miembro?-
No respondí
-A mi me gusta- volvió a decir
Me beso introduciendo su lengua y jugueteando con la mía, su mano que acariciaba mi rostro, empezó a juguetear con mis cabellos, luego beso mi cuello, mis orejas rozándolas con la punta de su lengua. No deseaba que se detuviera, me sentía algo excitado. Su mano bajo hasta mi pecho, levanto mi camisa y acariciaba mi piel, desabotono la camisa, la abrió, beso mi pecho y rozaba mis pezones con fuerza, pero con delicadeza al mismo tiempo. No aguante más y solté un gemido.
-Así me gusta- dijo
Su mano bajo hasta mi cintura, desabrocho mi pantalón, para luego bajarlo.
-¿Qué haces?- pregunte
-Te haré sentir placer…déjame hacerlo-
-Pero…ahhhh-

Sentí su mano en mi miembro masajeándolo suavemente
-Para…ahhh-
-Se que de verdad no deseas que lo haga-
Y tenia razón quería que siguiese, pero no podía admitirlo.
No tarde en sentir su lengua lamiendo mi miembro como si fuese un caramelo, no podía explicar lo que sentía, mi cuerpo temblaba al sentir su contacto, sentía que podía caer.
-toma mi pelo- dijo-si es necesario tíralo, quiero sentir cada expresión de tu placer-
Le hice caso, necesitaba tomar algo, su cabello era sedoso, baje mi cabeza para mirar y vi cuando introdujo mi miembro en su boca y lo succionaba de una forma inimaginable, jugando al mismo tiempo con su lengua.