XXXVIII

-Si, me ha ayudado bastante en mi integración en la escuela-
-Si….que bien…además es buen mozo, seguramente debe de tener bastante éxito con las chicas-
-¿por que preguntas eso? ¿Acaso te has interesado en el?-
-No…como se te ocurre preguntar eso- dijo avergonzada y ruborizándose
Yo reí – Dime tu no tienes ningún pretendiente ¿Verdad?-
-Si. Pero el no es de mi interés-
-¿quien?-
-Hank Conklu-
-Ah….lo recuerdo, en la granja de los abuelos, el siempre solía juntarse con nosotros-
-Si, uds siempre jugaban juntos-
-Lo recuerdo. Pero no sabia que estaba en la cuidad-
-No lo esta, es que me manda cartas diciendo que esta enamorado de mi-
-Pero por lo que recuerdo a ti nunca te agrado-
-Y aun no me sigue agradando, siempre me molestaba-
-Ja…lo recuerdo, yo solía ayudarle, era divertido-
Llegamos a casa, cenamos y luego me fui a mi habitación. Todo era tan tranquilo. Mi madre me interrumpe.
-Lo siento hijo, pero en la tarde te llego esta carta-
Me la entrego y luego se fue. Aquella carta no tenía remitente, solo estaba escrito mi nombre.
La Abrí y me di cuenta que se trataba de la letra de Gabriel.
“Que tal, no soy bueno escribiendo cartas.
Como debes de saber me encuentro en la casa de Gerald, me gustaría que nos juntáramos, pero si no quieres o estas ocupado con tu familia, no importa. De todas formas nos veremos en el baile de navidad, al enterarme que tu familia había sido invitada, le dije a Gerald que iría. Además quiero que conozcas a alguien importante para mí. A quien seguramente le agradaras. Bueno espero volver a verte, te admito que extraño ver tu bello rostro y tus adorables ojos verdes.
Gabriel”

XXXVII

-Marie Goddard ¿y el suyo?-
-Cedric Hodgson-
-Tu nombre lo he escuchado-
-Quizás mi apellido- dije riendo- ¿que edad tiene pequeña?-
-6 años ¿y ud?-
-17 años-
-La misma edad que mi primo. Deberían conocerse, mi primo es muy solitario, me gustaría que tuviese compañía-
Yo no dije nada
Cuando de pronto llega mi hermana junto con Paul y una señora, seguramente esa señora eral a aya de Marie.
-Señorita, menos mal que esta bien, su primo me hubiera matado si hubiese perdido a su adorada prima-
La niña me soltó y se fue con ella, se detuvo y dio la media vuelta – Nos veremos en el baile de Navidad. Mi primo ira, quiero que lo conozca- Luego tomo la mano de la mujer. Aquella señora nos agradeció muy aliviada y luego se marcharon.
-Esa niña era una verdadera muñeca de porcelana- comento mi hermana
-Mhmm…no se pero aquella niña me recordó en algo a Gabriel- dijo Paul
-Es verdad, se parecen…ambos parecen muñecos, son angelicales- respondí
-Quizás el primo del que te hablo, sea eses tal Gabriel- comento mi hermana
Era probable que fuesen familiares, además de Gabriel nadie podía ser tan bello como lo era el, ni siquiera Gerald, Gerald, tenia caleño castaño claro, era más oscuro que el de Gabriel, sus ojos era violetas, tenia una gran atractivo, el largo del cabello era el mismo largo que de Gabriel, pero aun así, ambos era muy diferentes. A Gabriel da algo de miedo acercarse, en cambio a Gerald es totalmente diferente. Y ahora aquella pequeña niña, Marie, no podía creer que esa niña de verdad existiera, aquellos grandes ojos azules, más oscuros que los de Gabriel, cabello larga un poco más oscuro que el de Gabriel, su mirada curiosa, una niña adorable, pero no parecía real, era una verdadera muñeca.
Paul se despidió de nosotros y cada uno se dirigió hacia su casa. Yo con mi hermana mientras caminábamos camino a casa, nos pusimos a hablar.
-Ese amigo tuyo, es muy simpático- dijo despacio

XXXVI

Yo reí. -Bueno, entonces en vez de estar hablando conmigo, ve a hablar con ella-
Paul sonrojo y pidió mi consentimiento, yo asentí con mi cabeza.
Me agrada Paul, además esta por salir del colegio, por lo que se este es su ultimo año de colegio, además es solo un poco menor que mi hermana. Y si me gustaría que alguien estuviese con mi hermana seria Paul. Los observe mientras hablaban, hacían una linda pareja, ya los imaginaba que se casaban, que lindo seria, pero creo que me precipite un poco al pensar en su boda, mejor disfrutaba el como se iban conociendo y quizás mas adelante les ayudaría.
Cuando la voz de mi hermana interrumpe mis pensamientos.
-Pruébate este- Me paso el traje, yo la mire con desgane, realmente no quería probármelo- Pruébatelo- volvió a decir.
Tome el traje y fui a me lo puse, mi hermana abrió el probador, me vio de arriba hacia abajo, sus ojos brillaban- Te ves hermoso-
Luego cerró el probador, me sentí avergonzado, me cambie a mi ropa habitual y entregue a mi hermana el traje. Ella se lo entrego al vendedor- lo llevamos- lo compro y luego nos fuimos.
Los tres fuimos a una plaza y nos sentamos, cuando una niña pequeña se nos acerca, era hermosa, era un ángel, parecía una muñeca, me hizo recordar a Gabriel.
-Me he perdido-
-¿con quien venias?- pregunta mi hermana
-Con mi aya-
-Yo te ayudare a buscarla- dice mi hermana, poniéndose de pie, toma la mano de la pequeña niña y caminan alrededor del parque. Yo y Paul nos levantamos y las acompañamos.
La niña me mira, suelta a mi hermana y toma mi mano, la miro sorprendido. Mi hermana sonríe- parece que le agradaste- dijo.
Estuvimos 15 minutos son encontrar la aya de la niña. Mi hermana dijo que iría donde la policía, Paul se ofreció acompañarla, yo me tuve que quedar en la plaza con la niña, quien no me soltaba.
-¿cual es tu nombre?-

XXXV Parte

-Las debe intimidar, parece un ángel- dijo mi madre
-¿Cómo se llama?- pregunto mi padre
-Es Gabriel, padre. El chico que conocí la primera vez que vine a este internado-
Mi padre me miro serio, sabía que no le agradaba escuchar aquello, desvió su mirada. Durante el resto del viaje no volvió a hablar, mi madre y mi hermana por el contrario no paraban de hablarme, era sofocante.
Finalmente llegamos a casa, al entrar era increíble pero no la recordaba bien, mi habitación se encontraba intacta, fue cómodo entrar y no ver a nadie y no incomodar a nadie. Pero con el pasar del día, me era algo extraño. Baje a ver si podía ayudar en algo con las preparaciones de navidad, cuando me informan que por primera ves iríamos a una fiesta de Navidad, era una invitación de una familia con la que trabajaba mi padre, era una fiesta de alta elite, pensé que era probable que me encontrara con algunos de mis compañeros, pensé en Gabriel ¿podría ser probable que lo viera? Al enterarse mi hermana me pidió que la acompañara a alguna tienda comprar un vestido o simplemente mandarlo a hacer. Realmente nunca me gusta acompañar a esas cosas, pero esta vez acepte, mi hermana se alegro y me dijo que también veríamos un traje para mi, para que impresionara a las chicas, de lo cual yo me reí.
Salimos entramos a una cantidad de tiendas, ella después de mucho eligió un vestido, pero pidió que le hicieran unos cambios por lo cual mañana tendremos que venir a retirarlo. Luego fuimos a ver mi traje, por mi parte no estaba muy interesado como iría vestido, cuando al interior de una tienda me encontré con Paul, quien nos saludo, mi hermana nos dejo hablando mientras ella me veía el traje.
-¿es tu hermana?-
-Si-
-Es muy linda-
-creo que si-
-¿tiene prometido?-
-No que yo sepa, ¿te gusta?-
-A quien no podría gustarle-

Parte XXXIV

Apretaba mis manos lo más que pude con los cabellos de Gabriel en el interior de mis puños, comencé a sentirme extraño, no paraba de gemir, mi respiración cada vez era más agitada.
-Para…no se que me ocurre-
-Yo lose…hazlo-
-no...¡Ahhh!-
Sentí un gran escalofrío, mi cuerpo tembló como nunca sentí que no podía mantenerme en pie, vi a Gabriel arrodillado mirándome con una sonrisa, pasando su lengua en sus labios, luego pasando su lengua en sus dedos.
-¿Qué haces?-
-Probándote…eres exquisito-
-eso es…-
Gabriel se levanto y me beso – Hazlo también-
-¿Qué? No entiendo-
-No con tu boca…aun no…pero con tus manos, hazlo, tu rostro avergonzado me ha excitado.-
Se apoyo en la pared y me coloco frente a el, desabrocho su camisa y su pantalón – Hazlo-
Lo bese y pero no pude hacerlo, me estaba pidiendo demasiado.
-no tengas miedo, que tu temor me excita aun más-
-pero…-
Su mano tomo la mía y juntos empezamos a masajearlo. Me soltó y acaricio mi cabello.- Sigue así-
Sentía que debía hacer lo mismo que el hizo conmigo, aunque no estaba listo, pero sentía que debía hacerlo, pero no fue capaz, me sentia avergonzado de solo ver su miembro en mi mano.
-No te preocupes- dijo
Solto su mano e hizo que yo lo soltara su miembro.
Subio sus pantalones
-Lo siento, te estoy pidiendo demasiado-
-No yo debo ser quien se disculpe, lo siento soy un cobarde, no debi, asi como tu lo hiciste, yo debi haberlo hecho-

Parte XXXIII

Me empujo hacia la pared y me arrincono ahí, su pierna tocaba mi miembro y no tarde en ruborizarme, ya que sentía un cosquilleo dentro de mí.
-Te ves tan lindo ¿sabes? Estas ruborizado ¿te sientes avergonzado de que mi pierna este rozando tu miembro?-
No respondí
-A mi me gusta- volvió a decir
Me beso introduciendo su lengua y jugueteando con la mía, su mano que acariciaba mi rostro, empezó a juguetear con mis cabellos, luego beso mi cuello, mis orejas rozándolas con la punta de su lengua. No deseaba que se detuviera, me sentía algo excitado. Su mano bajo hasta mi pecho, levanto mi camisa y acariciaba mi piel, desabotono la camisa, la abrió, beso mi pecho y rozaba mis pezones con fuerza, pero con delicadeza al mismo tiempo. No aguante más y solté un gemido.
-Así me gusta- dijo
Su mano bajo hasta mi cintura, desabrocho mi pantalón, para luego bajarlo.
-¿Qué haces?- pregunte
-Te haré sentir placer…déjame hacerlo-
-Pero…ahhhh-

Sentí su mano en mi miembro masajeándolo suavemente
-Para…ahhh-
-Se que de verdad no deseas que lo haga-
Y tenia razón quería que siguiese, pero no podía admitirlo.
No tarde en sentir su lengua lamiendo mi miembro como si fuese un caramelo, no podía explicar lo que sentía, mi cuerpo temblaba al sentir su contacto, sentía que podía caer.
-toma mi pelo- dijo-si es necesario tíralo, quiero sentir cada expresión de tu placer-
Le hice caso, necesitaba tomar algo, su cabello era sedoso, baje mi cabeza para mirar y vi cuando introdujo mi miembro en su boca y lo succionaba de una forma inimaginable, jugando al mismo tiempo con su lengua.

XXXII Parte

Ángel y William no deseaban separarse. Pero sus familias vinieron a buscarlos. Luego se retiraron Daniel, Paul y Aki.
Quise ir a despedirme de Gabriel, pero no lo encontré en el jardín, fui donde Gerald pero lo encontré despidiéndose de Alexander. Lo espere y le pregunte.
-¿Gabriel ya se ha ido?-
-No, me esta esperando en su habitación, ya que no regresara a su casa para no tener conflictos con su familia-
-¿Crees que se moleste si voy a su habitación?-
-No lo creo-
Me despedí de el y subí al tercer piso, me dirigí a su habitación, toque la puerta y espere a que alguien abriera. Gabriel abrió, estaba vestido con una camisa blanca mal abotonada, pantalones negros, con su cabello desordenado. Me sonríe y me invita a pasar. Me fije que solo había una cama y era una habitación muy amplia.
-¿no tienes compañero de habitación?-
-No. Solían asignarme compañeros, pero ellos luego pedían cambiarse. Así que ya no me han vuelto asignar compañeros-
-que tonto-
-Lo mismo pienso ¿Qué hay si tu eres mi compañero de habitación?-
-Pero…Ángel-
-Le has tomado cariño, pero si vienes acá, los cuartos estarán como antes y el será feliz-
-¿Cómo antes? ¿Feliz?-
-¿no te lo dijo?-
-No, ¿Qué cosa?-
-William y Ángel solían ser compañeros de cuarto. Ahora William duerme en el mismo cuarto de Aki y Daniel-
-Entonces…que culpable me siento-
-Entonces, se mi compañero de cuarto-
-¿Es lo que realmente quieres?-
-Me gustaría. Además como tengo influencia lo haré de todas formas-
-Entonces, no hay razón para que lo rechace-
-me gusta tu actitud-

XXXI Parte

No quise responder, me senita tan avergonzado que ni siquiera podía mirarlo a los ojos.
-Para serte honesto solo te recordé cuando la rechacé directamente, cuando ella me preguntaba por que no la aceptaba, en esos momentos tenia la rosa que me habías entregado, porque la tenía en mi bolsillo-
-Lo siento, no debí haber preguntado algo tan absurdo-
Gabriel sonrió tiernamente, se acerco a mi y tomo mi rostro con sus delicadas manos, toma mi mentón y levanta mi cabeza
-Mírame, déjame mirarte, eres hermoso. Ahora que rompí mi compromiso y no me volverán a comprometerme, consideraras ser mi pareja-
-¿Aun lo deseas? Comparado contigo, No soy la gran cosa-
-tonto, no te dejes influenciar por el resto. No soy la gran cosa, tal como sabes y como te he dicho soy un tipo normal-
-¿Puedo pedirte algo?-
-Dime-
-¿podrías besarme?- dije con vergüenza
-Pensé que nunca lo pedirías. Me haces feliz-
Sus labios se acercaron lentamente a los míos y los rozaron suavemente, un beso delicado que termino en forma rápida.
-No lo hagas, no termines- susurre
Gabriel sonrió y me abrazo – ojalá fueses mi prometida-
Yo reí. Me beso nuevamente, pero de forma apasionada, introdujo su lengua que empezó a revolotear dentro, intente mover la mía para juntarla con la suya. Lo abrasé fuertemente, ya que sentí que podía caer. Fue un largo beso, fue tal como lo deseaba. <> pensé.
Así pasaron días, semanas y meses. Siempre después de clases iba al jardín a pasar el tiempo con Gabriel, nos habíamos vuelto amigos, hablábamos de nuestras vidas, sobre nuestras experiencias en las clases, pero nunca me hablo sobre su familia, yo siempre le contaba sobre la mía, pero el jamás hablaba de la suya y siempre que yo se lo preguntaba el evadía el tema.
Pero pronto vino la navidad y nos darían unas semanas para ir con nuestras familias a excepción de algunos.

XXX Parte

Se fue de la casa y no regreso hasta muy tarde. Todo fue un desastre. El compromiso quedo totalmente roto y no piensan comprometerlo por un tiempo. Ahora regreso al colegio para no hablar con sus padres. Eso fue lo ocurrido”
-Que no te sorprenda la frialdad que posee Gabriel, según el relato de Gerarld. El es así- comenta Alexander
-¿Sabes por que lo hizo?- pregunte con la ilusión de que pudiese ser por mi.
-Esos son motivos personales de el. Pero normalmente el hará todo lo que sea para llevarla la contraria a su familia. Aunque yo soy la excepción y soy el único que lo conoce – contesta Gerald
-Ahora que sabes puedes dejarnos- interrumpe Alexander
-Antes de eso- interrumpe Gerald- ¿Cómo es que sabes sobre nosotros?-
-Ehm…bueno fue la tarde del viernes, cuando estaba buscando a Gabriel vine acá y los encontré juntos…bueno como decirlo…era claro que tenían un asunto mas allá de profesor-alumno- dije avergonzado, recordando tal escena.
Alexander empieza a reír- Que entretenido-
-Por favor no digas nada al respecto- me pido Gerald
-No lo haré, no se preocupe. Ahora si me disculpa, debo retirarme-
-Iras a ver a Gabriel ¿cierto?- pregunta Alexander
-Si-
-¿Te gusta?-
-Aun no estoy seguro…-
-Deberías…Gabriel no te esperara siempre-
Salí de la habitación y fui hacia el jardín oculto, donde lo encontré de pie frente a un rosal.
-Ya se que ocurrió- dije en voz baja
Gabriel voltea, note que estaba llorando, seco con su manga las lagrimas.
-¿Por qué lo hiciste?- pregunte
Dio un suspiro – Realmente no deseo casarme con niñas tontas, no me interesan-
-¿y que hay con lo que yo…?- me sentí tan avergonzado, como podría estar preguntando semejante estupidez, obviamente no había hecho eso por mi causa.- ¿Qué si lo hice por ti?- pregunto Gabriel, altaneramente.

XXIX Parte

-Lo siento por ella, que al contrario de mí, no tiene más opción que aceptar lo que uds dispongan. En cambio yo no estoy dispuesto a juntarme con alguien quien acepte sin refutar lo que otros disponen para ella-
Luego de decir aquello se retiro del comedor, Margaret lo siguió.
Yo seguí a ambos para ver que ocurría.
-¡Espera!- grita ella
Gabriel la ignora y sigue caminando, pero Margaret lo detiene tomando su brazo, el la mira con desprecio y retira su brazo de su mano.
-¿Qué quieres?-
-Es que…yo no tengo problemas con casarme con ud, es hermoso y se que habrá manera de llevarnos bien en el matrimonio-
-¿Quieres casarte conmigo, por que soy joven y hermoso, en vez de que te comprometan con un viejo?-
Margaret lo miro con asombro y miedo. En cambio Gabriel era frío parecía que era capaz de matarla a través de su mirada.
-Se honesta ¿me amas?-
-No…pero puedo llegar a amarte- dice con su mirada baja
-No seas tonta. Me Das pena. No se si llegaras a amarme, pero se que nunca llegare a amarte, al contrario ahora te desprecio. Si no quieres casate con aquel viejo, impone tu deseo de que quieres casarte con alguien a quien amas, pero deja de ser su muñeca-
Las lágrimas corrían por el rostro de la joven.
-Jamás se realizara este matrimonio. Nunca y aunque fueses la única mujer en el mundo, me casaría contigo-
-¿Es por tu belleza? Si crees que encontraras a una joven tan bella como tú lo eres, pues no lo harás, porque eres como un ángel y no hay otro ángel en la tierra-
¡Calla! No seas idiota, ¿Cómo puedes pensar tan superficialmente? Detesto a la gente que me trata distinto y tú lo haces-
-¿Me detestas?-
-Das lastima, mejor me marcho ya no soporto mirarte.

XXVIII Parte

-¡Ah! Ya veo…entonces entra-
-Pero… ¿no esta ocupado?-
-Bueno un poco – dijo mirando a Alexander-pero no importa esto no tardara mucho-
-¿Alexander no se molestara?-
-¿Alex? ¿Por qué?-
-Bueno uds dos estaban ocupados en sus cosas y yo les interrumpí-
-Entiendo…ya sabes, entonces entra-
Entre, Alexander se encontraba sentado sobre el escritorio.
-¿Acaso vamos a incluir a un tercero en lo nuestro? Sabes que no me gustan esas cosas-
-No digas estupideces, quiere saber lo ocurrido con Gabriel-
-Esta bien…debe saberlo-
-Bueno lo que ocurrió fue lo siguiente “En la cena de compromiso Gabriel estaba en silenciosos, su actitud era seria y fría ante lo que ocurría, no tardo en llegar su prometida junto a su familia, su nombre era Margaret Dorian, una joven aristócrata, bella pero no se podía comparar con la belleza de Gabriel. Sus cabellos largos perfectamente enlazados por las suaves cintas burdeas que combinaban con su cabello color ceniza, su piel blanca y tersa, ojos grises, una chica fina de compostura, recatada y educada. Parecía perfecta para el.
En el momento en que los presentaron Gabriel fue completamente indiferente hacia ella. En cambio Margaret lo saludo cortésmente y quedo encantada ante su belleza.
Durante la comida ninguno hablo, solo los padres de ambos quienes organizaban todo en respecto a la ceremonia.
Gabriel se puso de pie violentamente – No me casare-
-¿¡Que Dices?!- pregunta exaltado su padre
-Tal como dije…no pienso ser participe de semejante estupidez ¿Creen que ella será feliz conmigo? Si tanto quieren subir la reputación de esta familia, casen a otros de mis hermanos, quienes están dispuestos a ser participes de semejantes idioteces-
-¿Cómo puedes decir esto ahora, cuando ya esta todo listo? ¿Acaso no tienes consideración de los sentimientos de Margaret?- pregunta su madre

XXVII Parte

-Ya sabes, las parejas…-comento Paul
Tome leche caliente, no desee comer y me retire.
-Voy entonces…necesito descansar-
-Ve, cualquier cosa te avisamos- dijo Daniel
Caminando en dirección al laberinto, me asome a la entrada del colegio. Se encontraba un lujoso carruaje y quien bajaba de el era Gabriel, vestido de un largo abrigo negro, su pelo desordenado, tenia mal aspecto, parecía que tampoco había tenido una buena noche. Se abrió una de la rejas y Gabriel entro.
-¿Desea que le acompañe?- pregunta un hombre que le acompañaba.
-No es necesario, puedes marcharte-
El hombre hizo caso, subió al carruaje y se fue. Gabriel camina hacia el jardín oculto. Yo lo sigo, el se dio cuanta pero me ignoro. Antes de que entráramos al jardín Gabriel da la media vuelta
-No te diré que ocurrió…pregúntale a Gerald, yo no tengo ganas de hablar al respecto-
Quede mirándolo con sorpresa
-Ahora déjame solo-
Di media vuelta y camine hacia el laberinto, cuando logre entrar al centro me acosté en una banca e intente dormir, pero no pude. Se me venia a la cabeza la imagen de Gabriel, su actitud seria y algo molesta. Quise ir donde Gerald a preguntarle lo ocurrido, pero me obligue a descansar.
No se cuanto tiempo me quede dormido, pero no creo que haya sido demasiado el tiempo, al despertar me dirigí a los cuartos y fui a la oficina de Gerald, toque la puerta y me abre Alexander.
-¿Qué deseas?-
-Hablar con el profesor Gerald-
-Espera-
Alexander cierra la puerta, pero luego Gerald la abre, se encontraba algo desordenado, su camisa estaba abierta y dejaba al descubierto su pecho, sus cabellos largos estaban sueltos y desordenados.
-¿Qué ocurre?- pregunta amablemente
-Es que quería preguntarle sobre Gabriel…me dijo le preguntara a ud-

XXVI Parte

ambas manos. William acerco su rostro al de Ángel – Quitate las manos de la boca. Quiero escuchar que digas mi nombre, si es necesario gritalo-
Ángel rodeo con sus brazos el cuello de William y lo beso. Los movimientos de William cada vez se hacia mas rápidos, mientras Ángel gemía sin poder detenerse
-Li…Liam…ahh-
Me sentí incomodo escuchando y observando tal escena los gemidos de Ángel, los movimientos de William, el roce de sus cuerpos desnudos
-William…ya-
-Yo también…ahhh-
Se escucho el último y mas fuerte gemido de Ángel, seguido por otro gemido de William. Ambos se quedaron en la misma posición mientras jadeaban. Ángel soltó a William y cayo sobre la almohada, William se recostó al lado de Ángel y lo abrazo.
-Te Amo- dijo Ángel
-Yo igual- Contesto William
Se quedaron dormidos.
Por mi parte me fue imposible dormir. Las imágenes me daban vueltas, no podía dejar de pensar en aquello, pero no me desagradaba, no lo entendía realmente.
En la mañana del domingo me levante, me di un baño, me distraje un momento mirando la nada, lo que hizo que me quedara mas tiempo de lo normal en la tina, cuando me interrumpe un chico que tocaba la puerta para poder ocupar el baño. Me vestí rápidamente y Salí del baño, regreso a mi habitación William y Ángel seguían durmiendo, no desee despertarlos, Salí de ahí y baje a la cafetería, me senté junto a Paul, Aki y Daniel.
-¿Qué te ocurre? Tienes una cara- comenta sarcásticamente Paul.
-No dormí bien- conteste
-¿Por qué?- pregunta Daniel
-Nada…Solo no pude dormir-
-Ve a dormir al laberinto del jardín central a estas horas nadie lo ocupa. Así que puedes descansar ahí-dice Aki
-¿ocupado?- pregunte

XXV Parte

miembro de Ángel, lo acaricia y mueve su mano con un movimiento de arriba hacia abajo.
Ángel apretaba con sus manos las sabanas, aun se encontraba apoyado en sus codos.
-No sabes cuanto deseaba hacerte esto. Todo este tiempo te extrañe y cada noche soñaba que te hacia mío. No sabes cuanto te deseo y ardo de pasión por ti- dice agitadamente William.
-Liam…ahhh…yo también…quería que me sostuvieras en tus brazos, todas esas noches soñé con ser tuyo…ahhh-
William dejo de acariciar el miembro de Ángel, beso su pecho, lamió sus pezones, se levanto un poco y bajo su cabeza hasta la cintura de Ángel, volvió a tomas su miembro repitiendo el movimiento anterior, hasta que lamió fugazmente, dejando escapar un fuerte gemido de Ángel. William rió con malicia y siguió lamiendo con delicadeza que llenaba de placer a Ángel hasta que finalmente introduce el miembro de Ángel en su boca.
-¿Qué haces?...ahhh- el tono de Ángel, demostraba que se encontraba algo avergonzado
William no respondió y siguió.
-¡Para!...es que…no puedo…-
William se detuvo pasando la lengua por sus labios acerco su mano a la boca y lamió sus dedos de una manera sensual sin dejar de mirar a su amante.
-¿Estas listo?-
Ángel lo mira avergonzado. William separa las piernas de Ángel y hace que las doble, introduce sus dedos en forma lenta, provocando un grito ahogado en Ángel quien se apoya en sus codos y estira su cabeza hacia atrás. William retira lentamente sus dedos haciendo temblar el cuerpo de su compañero. William se apoya en sus rodillas y acerco su miembro al miembro de Ángel para después penetrar lentamente el cuerpo de su amante.
-¿Duele?-
-Si…Sigue-William empezó a moverse lentamente empujando el cuerpo de Ángel, provocando que el cayera y dejase de apoyarse en sus codos, los gemidos de Ángel cada vez eran mas fuertes que sintió vergüenza, se tapa la boca con

XXIV Parte

-¿se despertó?-
-No, solo se movió-
-pero su rostro esta hacia acá-
-pero esta durmiendo-

-No, es mejor que pares-
-No lo haré. Además si toco acá ya te olvidaras y pedirás que continúe-
-Ahhhh-
Pensé que era un depravado al querer mirarlos, porque jamás hubiese pensado ver a mis padres, ¿Por qué a ellos si? Tenía vergüenza de abrir mis ojos, pero mi curiosidad fue más fuerte y lo hice.
Ángel recostado sobre la cama completamente desnudo cuyo pecho descubierto subía y bajaba por causa de respiración agitada. William se encontraba sobre el acariciándolo con delicadeza, lentamente su mano baja hasta su miembro masajeándolo. Se sentían los silenciosos gemidos de Ángel.
-Te ves tan lindo, cuando te excitas-
Ángel sonroja avergonzado.
William susurra al oído de Ángel, besando su cuello, besaba desde bajo de su oreja hasta la base del cuello, pasaba con delicadeza la punta de su lengua haciendo el mismo movimiento pero a la inversa. La respiración de Ángel era acelerada y jadeante, cerró sus ojos y soltaba suaves gemidos que provocaban a William para que continuase. William se detuvo y quedo observándolo, Ángel abre sus ojos, su rostro estaba completamente ruborizado.
-¿Por qué te detienes?-
-Solo te estoy observando, eres hermoso. Cada vez te deseo más-
Ángel se levanto a apoyándose en sus codos, acaricia el rostro de William, lo acerca al suyo para besarlo apasionadamente.
-¿quieres que siga?- pregunta William
-Idiota, no debes preguntarlo-William introdujo sus dedos en su boca mientras los lamía, al sacarlos suavemente va tocando el pecho rozando levemente los pezones de Ángel, provocando un largo gemido. Lentamente William baja su mano hasta el

XXIII Parte

-Parece…bueno, ¿en que estábamos?-
-¡Para! Si estoy seguro de que duerme, seguimos-
-Esta bien, iré a ver-
Sentí que se levanto y se acerco a mi cama, cerré mis ojos y me hice el dormido
-Esta durmiendo-
-¡asegurate!-
Me movió la cama, pero no hice ninguna reacción.
-Si, esta completamente dormido-
-esta bien-
-¿no te excita hacerlo de esta forma?
-eres un pervertido-
Hubo un momento de silencio.
-¿continuemos?-
-Pero…podemos despertarlo-
-¡Vamos!...el chico esta durmiendo-
-es que…-
-Mira como me provocas y pretendes que no haga nada-
-¿provocar? Yo no te provoco-
-Claro que me provocas…la expresión que tienes ahora, no hay nada que me excite más-
-¿Qué?...no toques ahí…no quiero-
-Que ironía tu cuerpo dice otra cosa-
-¡Calla!...No tienes que decirlo tan fuerte
-Ya estas reaccionando-
-No lo digas…Cedric podría escuchar-
-Olvídate del niño y deja que me divierta-
-mmhm…-
-Estas tan sensible que reaccionas exageradamente cada vez que rozo tu piel-
-Cállate…ahh…mmhm…-
Cada vez se sentían ruidos extraños y menos sus voces. Me sentía avergonzado de estar ahí, pero no podía irme, además sentía curiosidad al respecto y decidí dar media vuelta para poder observar un poco.

XXII Parte

Estoy reemplazando al profesor Gerald. Por cierto ¿has visto a Ángel? No lo he visto en todo el día-
-Eeeh…bueno…-
-¿Qué fue eso? ¿Quién esta dentro?-
-Es Ángel-
-Que bien. Necesito hablar con él-
-¡No!, él no se encuentre bien-
Pero igual, así veo que es lo que le pasa-
-¡No!...de verdad, no se siente bien como para hablar con nadie-
Paul tiro la puerta, pero tome la manilla y la cerré
-Te dije que no, si lo haces se enojara conmigo-
-Demonios, estas extraño hoy-
Paul fue llamado por otro chico se despidió de mi y se fue. Me sentí aliviado, abrí la puerta y entre, cerré mis ojos y cerré la puerta a mis espaldas, suspire aliviado y al abrir mis ojos los encontré a los dos juntos en la cama. William estaba con su pecho desnudo sobre Ángel quien estaba con su camisa levantada y sus pantalones abiertos. La mano de William estaba tocando el pecho de Ángel.
-¿Qué tal?-dije
-Que tal... ¿como has estado?- contesta William
-Bien y por lo que veo tu igual-
William rió
-Ah!...bueno…lo que pasa…se puede explicar ¿sabes?-dice con nerviosismo Ángel.
-No te preocupes, ya tengo una idea de lo que estaban haciendo-
-Bueno, entonces me retiro- dijo William
-Por mi no se molesten-dije-yo solo quiero dormir, así que si quieren continúen.
Me acosté en mi cama e intente dormir
-¿estas seguro?- pregunto Ángel
-Claro, hagan como si yo no estuviese acá-
-Gracias-dijo William
Luego callaron, hubo silencio por unos minutos.
-¿ya esta dormido?-pregunta Ángel

XXI Parte

y Alexander hablando, luego ambos se separaron. Gerald se acerca a mi y me saluda, sonroje al verlo ya que recordé el día de ayer cuando vi tal escena, me sentí tan avergonzado que Salí de ahí lo mas rápido que pude. Luego me encontré con Daniel, quien me invito a jugar pelota, estuve jugando toda la tarde, inclusive nos olvidamos del almuerzo, después fui interrumpido ya que me avisaron que tenia visita. Fui al salón de visitas y encontré a mi madre junto con mi hermana, ambas me abrazaron y lloraron un rato.
-¿Cómo has estado? ¿Como te han tratado?- pregunta mi madre
-¿Te has logrado acostumbrar al ambiente?-pregunta mi hermana
-Si, al principio fue algo extraño, pero ya tengo amigos y me siento cómodo acá-
Luego estuvimos hablando de otras cosas, cuando termine de hablar con ellas fui a la cafetería, después de eso fui a la biblioteca e intente buscar libros que trataran el tema de la homosexualidad, pero mi búsqueda fue un fracaso. Fui al jardín oculto me senté en la banca y me puse a pensar sobre Gabriel y su compromiso. Me quede un rato dormido, al despertar ya estaba oscuro... Entre a los dormitorios, me acerque a la oficina de Gerald pero estaba cerrada.
-Si buscas al profesor Gerald, no se encuentra. Fue a la reunión de compromiso de Gabriel- me interrumpió Alexander.
Subí las escaleras y me dirigí a mi habitación cuando iba a abrir la puerta siento un ruido de que algo se había caído dentro, comienzo a voces, abro un poco la puerta para poder escuchar bien
-No lo hagas, puede venir en cualquier momento-
-es posible, pero acaso ¿no es excitante?-
-¿Cómo puedes decir esas cosas?, eres un pervertido-
-Pero te gusto ¿o no?-
-Si, pero no…podemos ser descubiertos… ¿Qué haces? No toques ahí-
Supuse de inmediato lo que probablemente estaban haciendo, de pronto fue sorprendido por Paul.
-Hey! ¿Qué haces fuera de la habitación?-
-Es que quise salir un rato-
-mmm…deberías estar dentro, ya es toque de queda-
-y tu ¿Qué haces fuera de tu habitación?-

XX Parte

Él se fijo en mi dedo sangrando, tomo mi mano y la acerco a su boca, introdujo mi dedo en su boca y toco delicadamente mi herida con su lengua, luego soltó mi mano yo acerque el dedo a mis labios. Tomo mi rostro y me beso como la primera vez. Después camino yéndose de donde nos encontrábamos –Lo pensare- dijo.
Me quede un rato ahí, luego decidí regresar, cuando entre a mi habitación, Ángel se encontraba estudiando.
-¿Qué te ocurrió? estas empapado-
-Es que estaba afuera-
Ángel saco una toalla y seco mi cabello.
-Ve al baño, toma un baño caliente, yo te llevare ropa-
Hice caso. En el baño pensaba en lo que había hecho, pero pensé que seria imposible que él hiciera caso a mi petición. Después de salir del baño, me fije que había una gran conmoción en los pasillos.
-¿Qué ocurre?- pregunte a Ángel
-Vienen a retirar a Gabriel, ya sabes para el compromiso-
Nos acercamos a la escalera para observar. Había un hombre alto, vestido de negro, tenía una apariencia lúgubre. Cuando se sienten murmullos. Era Gabriel, vestido con un abrigo negro, paso frente a nosotros, me miro y luego corrió su mirada, siguió caminando, bajo las escaleras y se fue.
-Es mi impresión…pero creo que Gabriel te miró, cuando paso frente a nosotros-
-No. Como se te ocurre, mirarme a mí, las cosas que se te ocurren-
-tienes razón-
Volvimos a nuestra habitación y nos dormimos. A la mañana del sábado baje a los jardines luego fui a la cafetería a tomar desayuno, me encontré con Paul y Aki.
-Veo que Ángel aun no despierta- dice Paul
-Es un perezoso- comenta Aki
-¿Te sientes bien?- pregunta Aki
-Si…solo son cosas que estoy pensando-Después subí a mi habitación, pero no había nadie, busque entre mis cosas y Salí de la habitación. En los pasillos bajo las escaleras me encontré con Gerald

XIX Parte

que apareciera. Pronto empezó a llover, pero no me moví, deseaba hablar con el. Cuando siento los pasos de alguien, levante mi cabeza y lo vi con un paraguas en su mano, lo coloco arriba mío protegiéndome de la lluvia.
-Te dije que no vinieras acá, si yo no te lo pedía-
-Pero nunca más volviste a hablarme-
-temía que salieras arrancando-
-Es cierto…las primeras veces reaccione asustado y la ultima vez Salí corriendo. Pienso que me odias-
-Idiota, como podría odiarte, te dije que me gustas. Pero no te hable mas, quería que si hablábamos, seria porque tu me buscaste y no yo a ti-
-Y ahora lo estoy haciendo, necesito hablar contigo y necesito pedirte algo-
-Dime-
-No te comprometas-
-¿perdón?-
-Escuche que este fin de semana, tu familia hará una reunión para hacer oficial tu compromiso con tu prometida. Y no quiero que lo hagas-
Gabriel se puso a reír, al principio ahogaba su risa con su mano, pero luego se destapo y empezó a reír sin detenerse.
-¿Qué es tan graciosos?-
-Y piensas que haré caso, solo porque tú me lo dices-
-Es cierto, pero debía hacerlo-
Me puse de pie y procedí a retirarme, pero Gabriel toma mi brazo y me detiene.
-Tú siempre arrancas, pero esta vez no lo harás. Dame razones por la cual no debería hacerlo. Dime que te ha incentivado a venir a pedirme esto-
-Fue solo un impulso, no podría explicarlo…Sentí la necesidad de hacerlo, pensé que si te comprometías nunca mas podría hablarte y no deseaba que eso ocurriese-
Gabriel sonríe se acerca y me abraza, me soltó y se quedo observando las gotas de lluvia cayendo.
Me acerque a un rosal, arranqué una rosa, me clave una espina en el dedo, que empezó a sangrar. Di media vuelta y me acerque a él, le entregue la rosa
–Por favor considéralo-

XVIII Parte

-Mientes, todo este tiempo has estado pensativo. Por suerte no descuidas los estudios-
-Es solo que no lo entiendo-
-Al que te beso-
-Si –
-No has hablado con el-
-No, lo he intentado pero me ignora completamente. Me trata como a un extraño-
La conversación fue interrumpida por Paul, quien abrió la puerta, su respiración era agitada, seguramente vino corriendo hasta nuestra habitación.
-Adivinen-
-¿Qué?-
-Gabriel saldrá este fin de semana-
-¿y que?-
-Que saldrá para comprometerse-
-¿Comprometerse?- pregunte con sorpresa
-Así es, al parecer su familia ya le tiene asignada su prometida y este fin de semana, habrá una reunión para hacerlo oficial.
-Que afortunada, quien sea su prometida-
-¿Qué te pasa Cedric?-
No se que me paso, estaba impresionado con la noticia, pensé que si Gabriel se comprometía, no tendría oportunidad de hablarle nunca mas.
Salí corriendo de ahí, no supe donde ir, lo busque en los pasillos, en los salones, en la biblioteca, pero no estaba, después recordé el jardín, pero no estaba, fui a la oficina de Gerald, pero me encontré con una gran sorpresa. Se encontraba con Alexander, quien se encontraba de pie apoyado en el escritorio con sus pantalones abajo y su ropa interior también, mientras Gerald se encontraba de rodillas lamiendo el sexo de Alexander, mientras se escuchaban gemidos de Alexander.
-Para, ya que me voy a….-
-Entonces hazlo-Cerré la puerta y me sentí aliviado de que no se habían percatado de que yo estaba ahí. Volví al jardín, pero no había nadie, así que me senté a esperar a

XVII Parte

con expresión fría, lo salude pero me ignoro y entro al salón. Entre al salón, no sabia donde sentarme todos me miraba y murmuraban, cuando sienta la voz de Aki, quien me llamaba, lo divise y fui a sentarme a su lado.
-¿te quedaste dormido?-
-No, es que tuve que despertar a Ángel-
-El siempre se queda dormido- dice riendo
Durante las clases estuve observando a Gabriel, parecía una estatua, no se movía, ni siquiera cuando escribía parecía moverse. Después tocaron la campana y la clase había terminado. Mientras se esperaba que el otro profesor llegase, todos hablaban, algunos se ponían de pie y se juntaba a conversar.
Gabriel en cambio siguió sentado, vi que tenia un libro y que empezó a leerlo, nadie lo molestaba, algunos lo observaban a lo lejos, como yo lo estaba haciendo.
-Miras a Gabriel-
-Si, es que no para de asombrarme respecto a él-
-Te entiendo-
No tardo en llegar el profesor y empezar la otra clase.
Luego llego la hora de almuerzo y todos salieron corriendo.Gabriel y yo fuimos los últimos en salir.
-Iré al comedor, te reservo un lugar, apurate!- dice Aki
Tarde en arreglar mis cosas, y pase al lado de Gabriel.
-Que tal ¿Cómo estas?-
Me miro con sorpresa y algo extrañado.
-Bien y ud- Su tono de voz era frió y cortante.
-Bien, quería hablar sobre lo de ayer-
Su rostro seguía igual de serio, tomo sus cosas y se fue.-Cierra el salón después de salir-dijo.
Después de ese día, y los días que vinieron Gabriel me seguía ignorando, no importaba cuantas veces quisiera acercarme a él o le hablara, parecía que no existía para el.
-¿Qué te ocurre?-pregunta Ángel
-Nada-

XVI Parte

Subimos las escaleras en silencio y entramos a la habitación, William y Ángel se sentaron en la cama y yo me senté frente a ellos.
-Bueno, respecto a lo que viste- empieza Ángel
-Nosotros, somos pareja, y hacemos lo que cualquier pareja hace, y si tienes un problema al respecto, buscate un nuevo circulo de amigos- intervino William
-Liam!-
-Es cierto-dije- pero yo no tengo ningún problema, yo ya lo sabía, por casualidad anteriormente los escuche-
-Lo escuchaste ¿Cómo?-
-La otra vez-
-No importa. Si de verdad no tienes problemas al respecto, todo esta solucionado. Ahora vuelvo a mi habitación, nos vemos mañana-
William se pone de pie y sale de la habitación. Ángel me mira con algo de nerviosismo.
-¿y como te fue con ese niño-
-Me beso-
-Ah! ¿Cómo? ¿Por qué?-
-Dice que le gusto…-
-¿y que paso?-
-Salí corriendo de ahí, no supe que hacer, estaba nervioso-
-¿te desagrado?-
-No, me gusto, por eso que Salí corriendo de ahí, porque no entendí porque me había gustado-
-Entonces arrancaste de ti mismo, no de el-
-Exacto-
-Mejor duerme, mañana será otro día, y las cosas estarán mas calmadas-
-Tienes razón-Al día siguiente desperté muy temprano, así que aproveche de darme un baño, luego me vestí y termine de ordenar mis cosas. Después vi que Ángel seguía durmiendo así que lo desperté, porque vi que se le haría tarde. Despertó a penas, pero cuando le dije la hora dio un salto, se vistió y me tomo del brazo para que nos fuéramos a clases. Me dejo frente a mi salón y corrió hacia su clase. En la puerta me encontré con Gabriel, estábamos los dos solos, me vio

XV Parte

-Eso preguntaselo a el. Pero dime ¿Qué sentiste cuando te beso?-
-Cuando pienso racionalmente al respecto, pienso que es algo que deberia sentirse asquerosos, pero cuando olvido lo racional y me concentro en sentirlo, fue algo placentero. De verdad desee que no terminara ¿soy raro no?-
-jajajaja….no lo eres. Analizate bien, quizas a ti tambien te guste Gabriel, es solo que piensas mucho en lo que dice la gente, olvidate de esos prejuicios y piensa en lo que sientes-
-Es difícil-
-lo es…pero lo superaras-
-Digame algo profesor ¿ud atiende mucho estos asuntos?-
-Asi es, soy el unico, ya que los otros profesores son pudorosos, y jamas aceptaria hablar algo como esto. En cambio yo no soy de esa forma-
-¿A ud tambien…?-
-Ah! Eso no deberias preguntarlo ¿sabes?. Eso es algo personal , pero te dire para que te sientas en confianza. Yo tambien tengo mi pareja dentro de este colegio y mi situación es difícil, que la de cualquier alumno-
-¿es un estudiante?-
-¿Qué crees?-
-Gracias por su confianza y le prometo que soy digno de aquella confesion-
-Me gusta tu actitud,Cedric-
-Me retiro, profesor-
-Llamame Gerald, fuera de clases-
Asenti con una sonrisa y Sali de su oficina, cuando me dirigia a las escaleras vi a Angel que al parecer estaba buscando algo
-¿Qué buscas?-
Angel corre y coloca sus manos en mis hombros. Luego veo que viene William, quien estaba bastante serio.
-A ti, te estabamos buscando-
-Debemos hablar. Interviene William
-Esta bien, subamos- conteste

XIV Parte

Caminamos por un pasillo oscuro, que solo estaba siendo iluminado por la vela que el llevaba consigo, entramos a una habitación, que era su oficina, pero al parecer el también dormía ahí.
-disculpa el desorden, ahora dime que te ocurrió-
-Es que todo es muy extraño para mi. No tengo nada en contra de ellos, pero para mi, no creo que sea correcto-
-¿Qué es lo que no es correcto?-
-Las relaciones entre hombres-
-Ya entiendo tu conmocion…Es una lastima que te ocurra esto-
-Sabia que existia ese tipo de relaciones, pero mi padre y la sociedad dice que eso no es correcto ¿Por qué lo hacen entonces? ¿Y por que es tan normal para ellos?-
-Eso es lo que dice la sociedad, la sociedad dice muchas cosas, pero ¿crees que no se hacen? Dicen que adulterio no es correcto pero lo hacen de todas formas. Y respecto a la naturalidad con lo que se los tomas los alumnos, es porque se sabe que la gran mayoria de ellos son asi, y mejor aun que son los nobles de la mas alta elite quienes estan relacionados deesta manera-
-Pero ¿Por qué se expresan con tanta naturalidad?-
-No creas que les es facil, pero realmente se aman, y cuando quieres o te interesa alguien, no es por su figura, es por como es esa persona y luego ves la forma que tiene. Claro que es difícil decir que te gusta uno de tus compañeros, no es facil, pero debes hacerlo, en vez de morir con aquello en tu interior-
-Dentro aca, todo eso debe ser de alguna manera mas facil ¿no?-
-Exacto, este es otro mundo, donde existe ese tipo de libertad, pero una vez que sales de aca, vives la realidad y lo ocurrido aca no es que un recuerdo-
-debe ser duro…pero yo debo tomarme mi tiewmpo, no puedo aun asumirlo-
-¿Qué te hizo Gabriel? Se que le interesas, eres el primero y probablemente el unico-
-Me dijo que le gustaba y me beso-
-¿y que sentiste?-
-No lo se, no lo entiendo. No soy nadie comparado con el ¿Por qué se fijo en mi?-

XIII Parte

-Exacto…dime sobre ese beso que te di ¿Qué te ocurrió?-
-Se que lo hiciste jugando, así que no te preocupes-
-Idiota, no lo hice jugando, lo hice en serio. Es lo que siento por ti-
-Pero si ni siquiera nos conocemos-
-No lo entiendes-
-No-
Gabriel se acerco nuevamente a mi, acerco sus labios, pensé que me besaría nuevamente, pero me susurro al oído <>, acaricio mi rostro, abrió un poco su boca y con la punta de su lengua toco mis labios, me estremecí al sentir aquel contacto- por favor ¿Qué haces?-
-te demuestro cuanto me interesas- respondió susurrando
No tardo en volver a besarme e introducir su lengua en mi boca, como jugueteaba en mi interior, tocando mi lengua, pensé que eso era algo asqueroso, pero extrañamente me sentí a gusto y deje que siguiera. Me sentí algo débil y con mis manos sujete sus ropas, luego se separo de mi-¿y?-
No supe responder, no sabia que decirle, realmente no quería que se hubiese detenido, pero no entendía lo que sentía.
-Veo que sigues sin palabras-
Me senté en el pasto, sin decir nada, es se abalanzó sobre mi y me abrazo
-Eres el primero que me ha hablado con libertad, el único que me trata como alguien común, sin miedos, no lo puedo evitar. Me gustas-
Al escuchar esas ultimas palabras, lo separe de mí, me puse de pie y Salí corriendo de ahí. Entre a las habitaciones, me encontré con el profesor, pero corrí a subir las escaleras e ir a mi habitación, pero al entrar me encontré con Ángel y William en la cama, semidesnudos. William se estaba vistiendo
-Cedric, se puede explicar- dijo Ángel
Di media vuelta y Salí corriendo de ahí, volví a bajar las escaleras, pero fui detenido por el profesor.
-¿Qué te ocurre?-
Las lagrimas corrían por mi rostro, no podía entenderlo, deseaba salir de ahí lo mas pronto.
-Ven, vamos a mi oficina, algo no anda bien contigo-

XII Parte

-Que te arriesgues, no le hagas esperar, quizás esta persona este yendo contra todo lo que le han impuesto por llegar a ti-
Sonreí amistosamente <>, el sonrió <>
Salí de la habitación y baje las escaleras corriendo, me encontré con el mismo profesor, que había visto antes
-¿Cedric?-
-Si-
-Ve, que te esta esperando hace mucho-
Salí a los jardines corriendo hacia el jardín oculto, entro al laberinto y llego hasta la banca donde habían hablado antes, pero no se encontraba ahí, pensé que quizás se había cansado de esperar y que se había marchado. Cuando sentí que alguien me abrazaba de atrás <>, gire mi cabeza para poder verlo, vi directamente sus ojos azules y su sonrisa angelical, me sentí nerviosos al tenerlo tan cerca mío, que me corrí nerviosos.
-¿por que te alejas?-
-Lo siento no debí-
-Seguramente te asuste, no debí haberlo hecho- dijo riendo, jugando con su pelo
-Sabes tenias razón, William y Ángel tienen pareja-
-¿Acaso ellos te lo dijeron?-
-No, los descubrí por accidente
-Entonces sabes que están juntos. Seguramente ahora que tu no estas en tu habitación ellos estarán poniéndose al día-
-¿Cómo?-
-Aun no sabes sobre eso, no importa es mejor dejarlo así-
-Dime ¿Cómo has logrado que el profesor me diera permiso para salir?-
-Es mi primo-
-no se parecen, quiero decir, es un joven muy lindo, pero no se parecen-
-Yo no tengo similitud con nadie de mi familia-
-ya veo-
-Al parecer cuando te dije de las relaciones entre hombres que existía acá, has quedado algo impresionado-
-Si, mentiría si te dijese que no, pero es algo a lo que debo habituarme ¿no?-

XI Parte

-Bien-
-Pues no lo pareces-
-Es solo que no entiendo-
-¿Qué cosa?-
-las relaciones entre hombres que existen dentro del internado-
-Tan pronto te enteraste. Mira Cedric, no debes entenderlo, solo asimílalo, mientras no seas tu quien este involucrado de esa manera con estudiante de acá, solo ignóralo, aunque se trate de alguien cercano a ti-
-¿tú conoces a alguien?-
-Bastantes, se dice que Alexander tiene su pareja, aunque realmente le gusta Gabriel, pero como Gabriel es totalmente imposible para cualquiera, esta con otro chico, de su circulo de amistades-
-Ya veo…-
-Pero no te tortures al respecto…Me tengo que ir, nos vemos después Y no e tortures mucho al respecto-
Subí a mi habitación y solo estaba Ángel escribiendo.
-Recibiste una carta-
-Ah?-
-Este sobre lo dejaron bajo la puerta y tiene escrito tu nombre-
Lo toma, lo abrí “Ven al jardín oculto, no te preocupes por el toque de queda, logré que le profesor encargado te dejare irte sin problemas”. No supe si debía ir, estaba dudoso.
-¿Un Admirador?-
Lo mire con extrañeza
-Lo siento-
-Esta bien, es algo así. Es alguien quien dice que quiere ser mi amigo, pero que no desea que nos vean en publico por eso quiere que nos veamos a escondidas a ciertas horas ¿Qué crees que deba hacer?-
-¿Qué sientes?-
-no lo se, me simpatiza esta persona, me agrada, aunque no le conozca en lo absoluto. Es alguien que ha capturado mi atención. Pero hay algo que me hace dudar, a veces pienso que me puede llevar a cosas que me han enseñado que no son normales, no lo se ¿Qué opinas?-

X Parte

Siento que abren la puerta era Ángel y William, quienes habían entrado a la habitación. Ni siquiera me había percatado que Ángel había salido de la habitación.
-Que tal- Saluda William
-Que tal- respondo, sentándome al mismo tiempo.
-Cedric, sabes, necesitamos hablar ¿podrías dejarnos un momento a solas?-
-Claro, iré a dar una vuelta-
-No te alejes de acá, mejor quédate en el pasillo. Alexander anda cerca-
Asentí con mi cabeza, abrí la puerta y me fui. Después me percate que no la había cerrado bien, así que me devolví para cerrarla bien, pero no puede evitar escuchar, la conversación de ellos dos.
-Sabes, Cedric ya me esta preguntando sobre las relaciones entre hombres, dentro del internado-
-Ángel, no vine para hablar de Cedric, No nos veíamos, hace tanto, te extrañe-
-Lo se, yo también, pero…-
-Después hablamos del pequeño niño nuevo. Ahora solo quiero besarte-
-William, para, ¿Dónde estas tocando?-
-Calma y calla, que si hablas muy fuerte llamaras su atención-
Decidí alejarme de ahí y Salí a las afueras del internado, pero en las escaleras me encontré con Alexander. Nos miramos.
-Toma tu libreta, lo siento-
Me sorprendió su actitud.
-Tengo que admitir que eres valiente niño, me enfrentaste como nadie se había atrevido y al parecer ahora tienes el agrado de Gabriel, no cualquiera logra llamar la atención de Gabriel y por eso mereces mi respeto. Pero no te ilusiones, nadie te dice que el no pueda perder el interés en ti algún día-
-¿celos?-
-llámalo como quieras, niño-

Seguí caminando y en las afueras me encontré con Gabriel, quien me miro y sonrió. Me sentí avergonzado, además que un profesor nos estaba observando. Tome otra dirección y me encontré con Paul.
-¿Cómo has estado?-

IX Parte

-¿Qué hay de ti?-
-Nadie se me ha acercado, pero además nunca nadie ha llamado mi atención, porque todos me tratan igual-
-Deberías hacer algo al respecto si no te gusta que te traten así ¿no crees?-
-Cierto, pero estoy haciendo algo ahora ¿sabes?-
-¿si?
-te estoy hablando, además tú llamas mi atención-
-Es un honor, pero estoy interesado en las chicas, eso es lo correcto-
-No existe lo correcto y cuando pases más tiempo acá, lo sabrás. Además ¿no te interesaría estar conmigo?-
-No lo sé, además no me gustaría tener ese tipo de relación, de una forma tan clandestina. Por lo menos si el resto supiera que somos amigos o algo, estaría dispuesto a tener ese tipo de relación-
Gabriel sonrió, con cierta ternura, se acerco a mí y beso mis labios superficialmente. Se puso de pie y camino yéndose del jardín. Yo por mi parte aun quede impactado ante tal acción cometida por el, era algo que no espere en lo absoluto. Después recordé que no le pedí mi libreta de vuelta.
Salí del jardín y Daniel me esperaba
-¿Cómo te fue?-
-Ah…no lo se-
Después fui a mi cuarto y Ángel, se encontraba arreglando mis cosas.
-Y ¿Qué tal te fue?-
-Puedo preguntarte algo
-Claro
-Es normal, las relaciones entre los alumnos del colegio
-¿no entiendo a que te refieres?
-Me es difícil, explicarlo. Sabes no importa, olvídalo.
Me recosté en mi cama, observando el techo, pensando en las palabras de Gabriel, en especial recordando aquel beso que me había dado. ¿Por qué cometió aquel acto? ¿Acaso solo quería jugar conmigo? Es probable, solo jugaba conmigo, no creo que iría enserio al respecto.

VIII Parte

-Exacto, quiero tener tu amistad-
-no tengo problema con aquello-
-Pero…-Su rostro fue serio- no debes hablarme delante de nadie
-No entiendo-
-solo nos hablaremos así, en este lugar. En los recesos y cuando no haya clases. Recibirás una carta en tu habitación, cada vez que necesite hablar contigo-
-Ya veo ¿te avergüenza hablar con un burgués?-
-No, pero se que si te vieran el resto, no será nada cómodo para ti-
Me quede en silencio, no me gustaba en lo absoluto lo que me decía.
-Ven siéntate junto a mi-
Me acerque y me senté junto a el.
-Se que es extraño, pero mis deseos son honestos, deseo tu amistad-
-Eres extraño y todo es extraño acá-
-Sabes, la primera vez que hablamos, me sentí tan cómodo contigo, desde ese día no pude olvidarte, quería verte de nuevo, y ahora que estoy contigo, deseo estar mas tiempo contigo, por eso te pido esto-
-Sabes, he escuchado muchas cosas de ti-
-¿Cómo cuales?-
-Que eres más bello que cualquier mujer y que inclusive hombres se han enamorado de ti-
-Ah…bueno al igual que tu yo también he escuchado ese último rumor, pero para serte honesto, nunca nadie se me ha declarado. Respecto a mi belleza, no sé, todos dicen que soy bello, pero yo te considero a ti muy hermoso. Tu cabello negro, dijo acariciando mi cabello ligeramente, tus ojos verdes, tu piel blanca y al parecer suave, decía mientras sus dedos levemente acariciaron mi rostro. Para mi tu honestidad es bella, para mi tu eres el ser hermoso.-
-Sabes sin ofender, pero lo que dijiste sonaría mejor si se lo dijeses a una chica-
-Sabes, acá es muy normal las relaciones entre hombres-
-¿es por que es un internado de hombres?-
-Cierto…Sabes inclusive Alexander tiene su pareja acá dentro del colegio. William y Ángel, también-

VII Parte

Delante se encontraba Gabriel, era magnifico, pero esta vez lucia impactante, en comparación con la primera vez que lo vi. Serio, con ojos fríos, miraba al frente.
Luego de la ceremonia todos me miraban, Daniel corre
-Hey! Que haces acá deberías ir donde te cito Gabriel, no puedes hacerlo esperar-
-Es que no se como llegar, ni siquiera se donde es-
-Yo te guío-
-Aquí es, ahora ve-
-¿no me acompañas?-
-claro que no. A mi no me cito, solo te cito a ti ¡Ve!-
Me adentre en un laberinto de hiedra hasta llegar a un gran jardín, algo oscuro, pero era hermoso, lleno de rosas y lilliums. En una banca se encontraba sentado Gabriel, completamente solo.
-Pensé que estarías con tus amigos-
-No son mis amigos, solo están a mi lado porque les conviene-
-Es muy lindo lugar-
-Si lo es, nadie entra acá, solo yo.-
-Así que soy el primero en entrar. Que honor-
-Se que no lo crees así-
-Es verdad. No entiendo mucho porque eres considerado un dios acá dentro, cuando yo te veo como alguien común-
El rió- Si te escucharan decir estas palabras serias golpeado ¿sabes?-
-Lo creo, pero pienso que tú no eres de esos-
-Sabes, para mi eres la única persona honesta. Me agradas. Me gusto como te enfrentaste a Alexander. Y me disculpo por haberlo dejado que te tratase de aquella manera-
-No es necesario-
-por lo que veo, ya estas dentro del círculo de William, me alegro-
-Es gracias a ti. Así que te estoy tremendamente agradecido y por favor si hay manera de recompensarlo, solo dímelo-
-Quiero ser tu amigo-
-¿Qué?-

VI Parte

-Vámonos- le dice a el y al resto.
-Espera….mi-
Todos se sorprenden de que le había hablado a Gabriel, en especial que lo detuviese-
-Después de la ceremonia, en el jardín oculto. Te entregare tu libreta y aprenderás a como comportarte- Su mirada era fría, y su voz era cortante.
Luego se fue.
-Wow, ya te metiste en problemas- comenta Daniel
-Pero me encanto como le respondiste a Alexander- dijo Paul
-Ven necesito hablar contigo- interrumpió William
El resto nos dejo solos y se fueron a tomar asiento
-No se preocupen, le guardamos asientos- grito Ángel.
-¿Qué ocurre?-
-Mira te introduje en mi círculo, por que Gabriel, fue quien me lo pidió-
-Lo siento, no me meteré en más conflictos-
-no es por eso, por cierto me gusto tu actitud frente a Alexander, creo que nadie lo había confrontado así, nunca. Lo que llama mi atención es que Gabriel se haya tomado tantas molestias contigo-
-no entiendo-
-Mira sino fuese por el, tu no estarías con nosotros ahora. Y ahora, fue el quien detuvo ese golpe de Alexander, el nunca se involucra en los conflictos y nunca detiene a Alexander, además te hablo, enfrente del todo el colegio-
-De todas formas no entiendo, él es un estudiante como todos, por que esa actitud hacia el-
-No es como todos. Gabriel, es el más noble de todos, es el más rico. Y es superior a todos. Para algunos es un ángel, para otros un dios. Inclusive ha habido estudiantes, inclusive jóvenes profesores que se han enamorado de el. Dicen que es más bello que cualquier mujer.-
-Ya entiendo…de todas maneras, no soy nada para el, ni siquiera nos conocemos. Creo que le di pena. Solo eso-
Luego de eso nos sentamos y presenciamos la ceremonia.

V Parte

-Ahora debemos sentarnos, pronto empezara la ceremonia de inicio de clases- dice Paul

-Miren, ahí viene Gabriel- interrumpe Daniel
-como siempre rodeado, de la mas alta elite- comenta Ángel
Uno de los niños me observa y se acerca a mí.
-¿Quién eres?-
-Soy Cedric Hodgson-
-Ah! El nuevo burgués- Mira sus compañeros y sonríen maliciosamente.
-Hey! Henry! ¿No era que era feo? Al parecer cualquiera te gana en belleza incluso uno como este.-
Otro de los niños se acerca a mí, con su mano toma mi rostro y lo levanta- Que lindos ojos- comenta
-¿Qué es esto que tienes en la mano?-
Toma una pequeña libreta que tenia en mis manos, que me la había regalado mi hermana.
-Hey! Dejar de molestarlo- dice William
-El asunto no es contigo, Liam-
<>
Los otros empiezan a reír.
-Que nombre tan simple el de tu hermana, parece de los nombres de las mujerzuelas
-Que cruel- comenta Paul
Me enfurecí al ver que insultaban a mi hermana, por su nombre.
-Al parecer conoces muy bien el nombre de las mujerzuelas ¿vas a visitarlas muy seguido?-
Los otros ríen.
-¿Quién te crees? Insolente.
Vi su puño aproximándose a mi rostro, para pegarme, pero veo que es detenido. Era Gabriel, quien lo detuvo y tomo mi libreta.
-Gabriel-
Todos empiezan a hablar, a susurrar.
Gabriel abre la libreta y empieza a verla luego la cierra con una sola mano.

IV Parte

-Porque yo para poder ser internado en el círculo social de William demore un mes, mientras tanto tuve que sufrir bastante los maltratos de los nobles engreídos. En cambio tú fuiste admitido inmediatamente, al parecer alguien hablo a tu favor, pero no se sabe quien-
No tarde en acordarme de Gabriel, quizás pudo haber sido el.
Rápidamente salimos de la habitación y fuimos al jardín, caminamos directamente hacia una estatua de una ninfa, donde estaba reunido en pequeño grupo de jóvenes-
-Aquí les traigo, el nuevo-
-Vaya!, es lindo, no como lo decían Francis o Henry-
-Sabes lo idiotas que son. Se creen dioses griegos y para ellos nadie puede ser más hermoso que ellos-
-Ah! Pero Gabriel sin duda es el más hermoso del colegio-
-Idiota el es un ángel, no es de este mundo-
Hey! Por que no se callan, están asustando al nuevo-
Dice en joven del centro, alguien con bastante postura, cabello rubio y ojos color miel, piel blanca muy pálida.
-Soy William Swann, Bienvenido a nuestro grupo-
-Gracias, soy Cedric Hodgson-
-Mi nombre es Aki Jonne- un niño de estatura algo baja, pelo claro, casi blanco, ojos celestes y muy palido.
-El es finlandés, por eso su apariencia, por cierto soy Paul Manchen- un joven de pelo castaño oscuro, ojos cafés, de gran estatura, era mas alto que el resto.
-Y yo soy Daniel Munchner, soy primo de Paul- su pelo era mas claro, pero sus ojos eran negros, era mas bajo que su primo, pero era delgado, lo que lo hacia lucir alto.
-Nosotros, no somos nobles, somos burgueses y hemos venido a parar acá, por esfuerzo de nuestros padres. Tú eres el más noble del grupo. Entre nosotros nos protegemos de los abusos o cualquier otra cosas que lo nobles engreídos hagan contra nosotros-comenta William
-nosotros estamos en las mismas clases, así que te explicare después el funcionamiento de todo-dice Daniel

III Parte

-De todas formas, estoy seguro que su hijo debe ser igual que el-
No quise responder no sabia que decir, pensé que era probable, ya que seguramente aquel día, cuando entrara al colegio, el haría como si nunca me hubieses conocido.
Finalmente el día llego mi madre se despidió tan aprensiva como siempre, mi hermana mayor de igual forma, no quiso entregarme mi bolso hasta que mi padre la obligo. Mi padre fue a dejarme se despidió con un fuerte abrazo, note en sus ojos que estaba emocionado, pero que no se quebrantaría tan fácilmente, dio media vuelta y se fue.
Al entrar al internado, había muchos niños de distintas edades, en las afueras, todos parecían conocerse, hablaban reían.
Mientras caminaba hacia mi habitación un joven me detiene
-¿eres Cedric Hodgson?-
-Si-
-que bien que te encontré, mi nombre es Ángel Fauntleroy y soy tu compañero de cuarto-
-es un placer-
-Lo mismo digo, eres lindo, pensé que no lo serias, se rumorea, que eras un joven sin el menor atractivo-
-No entiendo-
-Es que algunos niños nobles, piensan que la belleza lo es todo, y piensan que los que no son noble son feos-
No supe responder.
-Por eso comenzaron el rumor de que eras feo, pero como se equivocaron, cuando vean tus ojos verdes, se comerán sus palabras- dijo sonriendo.
Entramos a la habitación después de subir las escaleras y caminar por unos largos pasillos.
-Ahora iremos a hablar con William Swann, quiere conocerte y hacerte que entres en nuestro círculo social, para que no te molesten-
-Pero tengo que arreglar mis cosas-
-Las arreglaras después, vamos. Sabes tienes suerte-
-¿Por qué?

II parte

Era un joven como de mi edad, delgado, piel blanca, pelo castaño claro, ojos azules con tonalidad gris, sus mejillas eran rosadas, vestía bastante elegante con un pañuelo atado a su cuello, su camisa estaba desabrochada mostrando un poco su pálido pecho.
Me sonríe y estira su mano <>
Le doy mi mano y la estrecha fuertemente- Soy Cedric Hodgson- respondí
-He escuchado de ti, eres alumno nuevo ¿no?-
-Si-
-Que bien será interesante tenerte en este lugar, pero ten cuidado, los niños son crueles y te harán pasar un mal rato-
-Lo imagino, pero tendré que aprender a lidiar con aquello-
-Apenas llegues intenta juntarte con William Swann, el es bueno y protege a todos los niños como tu-
-¿Cómo yo?-
-Si, ya sabes que no son nobles directamente-
-entiendo-
-Bueno nos veremos el primer día de clases-
-Si, lo haremos-
Ágilmente siguió caminando, hasta que lo perdí de vista-
Después de eso volví donde mi padre, quien me esperaba.
-¿Dónde te habías metido?-
-Estaba conociendo el lugar-
-Es grande ¿no?-
-Si que lo es… ¿sabes? Estuve hablando con un estudiante de acá-
-¿ya hiciste un amigo?-
-No…solo hable un poco con el-
-¿con quien?-
-Gabriel Burnett-
-Es mejor que no vuelvas a hablar con el-
-¿Por qué?-
-Es un niño presumido y egoísta. Mira su padre era así, era muy cruel con los otros que no era como el. Siempre se creyó superior al resto-
-El no parecía así-

Una de mis Historias

Todavia no sé que titulo colocarle...pero aqui va mi primer historia gay.

----------------------------------------------------------------------------

Fui sorprendido al enterarme que entraría a un internado, realmente no deseaba separarme de mi hogar, pero al parecer mi padre se había esforzado bastante al lograr matricularme en tal prestigiosa escuela. Mi madre lloro al enterarse y soltó su llanto y corrió a abrazarme.
-No deseo dejar a mi pequeño solo en este mundo-
-Mujer, no exageres!- dice mi padre.
-No estoy exagerando, es que nunca me imagino esto-
-Hijo dime que opinas- me pregunta, con una expresión seria
-Bueno, me sorprende esta noticia, no mentiré y te digo, que no lo esperaba, pero te estoy agradecido de que lo hicieras-
Mi padre miro a mi madre y la abrazo <>
Al día siguiente tuve que ir al internado a conocerlo e ir a retirar algunas cosas. Fui en la compañía de mi padre.
Era un lugar alejado de la cuidad, acaparaba gran terreno. Era un lugar gigantesco. Mi padre se quedo hablando con el director del internado, para terminar mi matriculación, mientras tanto fui a dar una vuelta por el lugar, para conocerlo, aprovechando que estaba vacío, ya que estábamos en los últimos días de verano.
En ningún momento deje de sorprenderme por aquel lugar tan grande, lujosos e imponente. Sabia que mi vida ahí seria algo dura, ya que todos los estudiantes de ahí son jóvenes nobles, en cambio yo soy un burgués, aunque posea sangre noble, no soy más que un burgués. Ya que mi padre al casarse con mi madre, lo desheredaron y lo desligaron del linaje.
Seguí caminando por los jardines del internado, y me deje guiar un leve sonido del correr del agua, no tarde en encontrarme con un pequeño riachuelo ligado a un tranquilo lago. En la orilla había un joven acostado y al parecer estaba durmiendo. El no tardo en percatarse de mi presencia, veo que se sienta y gira para verme. Yo no podía verlo claramente debido a la luminosidad del sol, que no me permitía ver bien.
-Lo siento, le interrumpí, me marcho-dije con cierto nerviosismo
-No es necesario, no te vayas- dijo el
Se puso de pie y camino lentamente hacia mí

-----------------------------------------------------------------------------------------------