14 ene 2009

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Finalmente llegamos al teatro, entrar fue algo dificultuoso, pero lo logramos sin mayores problemas. Gabriel lucia encantado con el lugar. Entramos a los camerinos, las mascaras colgadas, los trajes malgastados por el tiempo, arruinados por las polillas. El escenario, tenia un piano antiguo en un rincón, le faltaban teclas, la madera estaba siendo comida por las termitas.
Nos sentamos en una de las butacas, la mayoria estaban en mal estado, pero logramos encontrar unas que no se encontraban tan mal.
Nos miramos el sonrio y beso mi frente. – me entere que realmente no soy hijo de mis padres-
-¿Cómo es eso?-
-Realmente no se quienes son mis verdaderos padres, pero se que a quienes conosco como mis padres, no lo son.-
-No entiendo-
-lo se, es difícil entender, ni yo lo entiendo-
-Se que pertenesco a esa familia, aunque no me paresco a mis padres, tengo cierta similitud con Gerald y Marie-
-no entiendo-
-escuche a mi madre hablar con Gerald. Le dijo algo, no se bien que porque no lo escuche, pero recuerdo que dijo “no cuide a ese niño para nada. En especial un niño que no es mio”-
No respondi, no tenia palabras, que se supone que debia decir.
- por eso llegue a la conclusión que no soy su hijo –
-¿le preguntaste a Gerald?-
- No, no lo he hecho, no se como preguntarselo, no se que deberia decir-
-Ahm…ehm…-
-no intentes decir nada, no puedes nisiquiera yo se que decir, no te preocupes solo escucha. Como te he dicho mis padres desde que era pequeño me han tratado mal ¿Qué padres le dicen a su hijo que es feo? Aunque lo fuese, los padres siempre dicen que sus hijos son criaturas hermosas, ¿Qué tipo de padre casi le arranca los dedos a su propio hijo? ¿ Que madre deja que un sacerdote de latigasos a su propio hijo y lo llama hereje?-
-Ninguna-
-En cambio ellos lo hicieron eso y mucho, mas es claro yo solo soy algo que tuvienron que cuidar por alguna razon, pero nunca me quisieron realmente-
Creo que si es Gerald quien lo sabe, deberias preguntarle-
-Es cierto, pero en cierto aspecto me da miedo enterarm de la verdad-
-Depende de ti, si tu quieres te enteras sino sigues viviendo como lo has hecho hasta ahora-
-no podria…pero-
-pero ¿Qué?-
-¿Me acompañarias en esto?-
-Claro que lo hare, no necesitas preguntar-
Gabriel sonrio y me beso, introdujo su lengua en mi boca. Su mano debajo de mi camisa empezo a acariciar mi cuerpo, pero en ese momento cai del asiento, se habia desarmado. Ambos nos miramos con sorpresa y luego empezamos a reir. Nos fuimos de ahí y regresamos a casa.