31 ene 2009

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En la cena les dije a mis padres que Gabriel se quedaria durante toda la semana restante de vacaciones, mis padres se miraron cuestionandose, pero finalmente aceptaron.
Al dia siguiente acompañe a Gabriel donde Gerald, cuando llegamos me encontre con Alexander.
-Te habias desaparecido, pero ya veo que estuviste en buenas manos-
-Me quedare en su casa, hasta volver al internado-
-como quieras-
-ahora vengo a buscar mi ropa y ademas necesito hablar algo serio contigo-
-¿Qué es?-
-Es sobre lo que hablaste con mi madre al final de la fiesta del otro dia-
-no se de que hablas, sabes que tu madre me odia y nisiquiera me dirige la palabra-
-Lo se y me sorprendio verlos hablando, pense que se trataba de algo importante, pero cuando la escuche decir aquellas palabras, era obvio que era importante-
Gerald palidecio, sabia de lo que hablaba.
-Alex, vete, nos vemos después-
-Pero…-
-No me discutas-
-¿Qué hay del chico?-
Gerald miro a Gabriel
-Cedric se quedara y escuchara, el sabe de lo que hablo-
-¿acaso son amantes?- preguntó ironicamente Alexander
-Exacto, somos amantes…y tu no eres nada mio-
Alexander quedo estupefacto, se puso serio – pero soy algo de Gerald- dijo mirandolo
-Alexander, esto es algo privado de Gabriel, si el no quiere que sepas, no puedes…ni siquiera yo debia saberlo- dijo seriamente, su rostro estaba algo triste.
Gerald acompaño a Alexander a la puerta, Gerald quiso despedirse besandolo, pero Alexander no lo dejo – hablaremos después- y cerro la puerta.
-¿estas seguro que quieres que el chico escuche?-
-Si, ya le dije todo lo que escuche a el-
Gerald me mira y sonrie amablemente. – sientense-
Yo y Gabriel nos sentamos en un sofa largo, Gerald se sento en una silla al frente de nosotros.
-ahora me diras- dijo serio Gabriel
-asi es…pero primero dime lo que escuchaste-
-¿para poder arreglarlo? Escuche lo necesario, para imaginas la verdad y lo suficiente para que no me mientan-
-entonces me lo diras…-
-Te dijo que no me crio para nada, en especial porque no era su hijo-
Gerald dio un suspiro
Gabriel lo mira con impaciencia