13 oct 2008

XXXXVII


-Gabriel, para te dije que…ahh-
-Tú dices algo, pero cuando toco acá, me dices otra cosa-
-Gab…ah...-
-A que quieres que le haga caso, cuando me dices que me detenga o cuando gimes de aquello modo tan seductor-
No pude decir nada mas, no podía parar de gemir, aquello que me hacia, no quería que se detuviese.
Pero en ese momento justo fuimos interrumpidos por alguien quien tocaba la puerta.
-Gabriel, la puerta-
-Ignórala-
Volvieron a tocar pero mas fuerte
.Demonios- exclamo Gabriel- ¿Quién es?-
-¿quien ocupa esta habitación?- dijo una voz
Gabriel me mira con sorpresa – esa voz- murmura – ¿padre?-
La voz no respondió, pasaron unos minutos - ¿Gabriel?-
Gabriel me miro y me dio señales para que me ocultara. Me escondí en el closet. Y una vez que cerré la puerta el abrió. Era un hombre alto de cabellera rubia casi plateada, ojos verdes y de postura imponente.
-Tal como lo pensé, no has cambiado tu nivel de lujuria. ¿Qué dice mi madre al respecto?-
-no hables de esa forma a tu padre. ¿ y tu que haces acá? También debes estar con alguien-
-¿acaso ve alguien dentro de esta habitación?, solo estoy yo. Quiero escaparme de toda esa gente, por eso vine acá a estar solo-
-Me dices que estas solo en esta habitación… ¿y quieres que te crea algo como eso?-
-Eso es problema suyo. Quien esta en problemas es ud. Y ¿Quién es ella? Es mas joven que mi madre, podría ser mi hermana, es extraño, su rostro me es familiar. No me digas que es la hija de algunas de la amigas de mi madre. No tienes vergüenza-
-¡Calla!-
-Ud mejor váyase si no quiere armar un lío y que todos lo vean intentando entrar a esta habitación con esta joven-
-Lo siento tanto, es vergonzoso- interrumpió la joven
Gabriel la mira con sorpresa y con desprecio – debiste haber pensado eso , antes de llegara tan lejos con este viejo-
-Mas respeto- grito el hombre
Gabriel empezó a reír - ¿respeto? Mira como estas enfrente mío, con una joven que podría ser tu hija y me exige respeto, no me haga reír-
El hombre lo quedo mirando con enojo. La joven se escondía detrás de aquel hombre.
-Que le apuesto que después de esto, ira a otra habitación y no tardara nada en acostarse con esta joven. Claro es la única manera en que olvidara lo ocurrido y se calmara y pensara en como chantajearme-